Recetas

Ingredientes:

Masa Churros:
1 cucharadita de Levadura en polvo
1/2 cucharadita de sal
1 tazón de Agua
1 tazón de Harina (mismo tamaño que la taza de agua)
Aceite de oliva (para freír)
Coberturas chocolate:
100 ml de Leche
1 Tableta chocolate blanco cobertura
1 Bote colorante rojo
50 gr Mantequilla
1 Tableta chocolate negro cobertura

Preparación:

  1. Comenzaremos poniendo una cazuela con agua al fuego, cuando empiece a hervir, retiramos del calor y añadimos de golpe la mezcla de harina con la sal y la levadura.
  2. Al principio os costará un poco ya que la masa se convertirá en una especie de chicle que tenderá a pegarse, pero seguimos revolviendo hasta que se desprenda de las paredes y formemos una pasta consistente. (Siempre fuera del fuego).
  3. Dejamos reposar un par de minutos para que se enfríe un poco y procedemos a rellenar la manga pastelera con una boquilla ancha estrellada.
    Calentamos abundante aceite en una sartén y vamos friendo los churros por turnos.
  4. No es recomendable poner muchos de cada vez, pues enfría mucho el aceite y tardarían más en dorarse.
  5. Yo aconsejo que el aceite no esté excesivamente caliente, pues se dorarían por fuera muy rápidamente y corremos el riesgo de que queden crudos por dentro.
  6. Una vez fritos, vamos colocando en un papel de cocina para eliminar el exceso de grasa.
  7. Espolvoreándole una simple capa de azúcar ya estarían de vicio, pero nosotros vamos ir un poco más lejos.
  8. Aprovechando que me sobrara un poco de colorante rojo de realizar el Battenberg Cake y tenía unas tabletas de chocolate blanco y negro por casa, vamos a realizar unas coberturas para los churros de chocolates blanco, negro y rosas!!!
  9. Churros cubierto chocolate negro: Desmenuzamos el chocolate y lo metemos en una olla a derretir al baño maría.
  10. Cuando veamos que está casi derretido, removemos para que se acabe derritiendo por completo y añadimos la nuez de mantequilla.
  11. Mezclamos bien para que todo se combine y sumergimos nuestros churros sobre el chocolate. Una vez bien bañados, los ponemos a enfriar sobre una rejilla.